11/12/2014 “Una ciudad inequitativa”

11 diciembre 2014

La Voz del Interior. Columna de opinión sobre la investigación de “Política Urbana Metropolitana” realizada por docentes de la UBP.

 

Estudio sobre Política Urbana Metropolitana (Universidad Blas Pascal).

 

La calidad de los servicios públicos que recibe la población de la ciudad de Córdoba no es buena. Existe, a la vez, una escala descendente en su valoración desde el centro hacia la periferia de la urbe.

 

Si bien no es fácil atender las necesidades de una población de casi 1,4 millones de habitantes, incrementada por la presencia de un denso cordón suburbano, con 386 barrios y una superficie de 57.600 hectáreas, las aspiraciones de los cordobeses es gozar de una vida digna.

 

El crecimiento poblacional y las crisis económicas afectaron, sin dudas, el desarrollo de una de las manchas urbanas más grandes del país. Las malas administraciones agravaron esas carencias.

 

Un informe elaborado por técnicos de la Universidad Blas Pascal, con recursos del Gobierno provincial, mostró el grado de insatisfacción de los habitantes de la ciudad de Córdoba en relación con la calidad de los servicios.

 

El ejido urbano fue dividido en cuatro zonas, identificadas con letras de la A a la D, que –en general– muestran una peor valoración de los servicios a medida que uno se aleja del microcentro, donde la única prestación cuestionada es el servicio de cloacas.

 

Las zonas C y D tienen percepciones por debajo de la media, lo que lleva al estudio a identificar la existencia de “barrios de primera” y “barrios de segunda” en función de la concurrencia, para estos últimos, de pocas y malas prestaciones.

 

Por caso, el 65 por ciento está disconforme con el servicio de mantenimiento de calles, lo que torna más difícil y costoso el acceso al centro de la ciudad, donde se emplazan las principales oficinas públicas, comercios y servicios.

 

Los barrios colindantes con la avenida de Circunvalación, o los que la atraviesan en su trazado, están aún más disconformes que los periféricos.

 

En lo que debe interpretarse como un llamado de atención a las actuales autoridades y las que resulten elegidas para conducir la Municipalidad de Córdoba desde 2015, el informe plantea que los problemas se deben a “deficiencias en las políticas públicas vinculadas con un desarrollo ordenado de la ciudad, a la indefinición de prioridades de inversión que acompañen el acelerado crecimiento, a la falta de continuidad en las políticas de gobierno y a un escaso control de la obra pública”.

 

Además, hay observaciones sobre la calidad de servicios regulados desde el ámbito nacional, como telefonía y gas natural, y críticas para los de incumbencia del Gobierno provincial, tales los casos de Epec y Aguas Cordobesas.

 

Es hora de recuperar a Córdoba, para lo cual sus habitantes también tendrán que aportar su cuota de solidaridad y responsabilidad, por caso, en trabajar por una ciudad más limpia y sin basura en la vía o espacios públicos.